¿Cómo de cuestionables son nuestros gustos?
Nuestro gusto o expresado de otra manera, preferencias, son un reflejo de nosotros mismos, pero de nada servirían si no pudiéramos compararlos con los gustos o preferencias que nos rodean.
De que nos valdría saber que nos gusta el plátano o montar en bicicleta si no existieran otras opciones con las que comparar. Cómo sabríamos que preferimos unas vacaciones en una cabaña en el bosque si no hemos estado antes de fiesta en la playa.
¿Podríamos saber lo que nos gusta de manera independiente a las influencias sociales, culturales, económicas que nos rodean?
Quizás no haya manera de saberlo, ya que cómo animales sociales que somos, desde que nacemos estamos expuestos a estas influencias y nuestras preferencias se va conformando a medida que crecemos.
Podríamos ser definidos por nuestros gustos, y en el fondo es una parte importante del sistema en el que vivimos, el sistema capitalista explota estos gustos y preferencias y la necesidad de comparar para vendernos todos tipo de productos.
Y uno de los logros del sistema capitalista es que nos identifiquemos con aquello que compramos y usamos, así se podría decir que somos aquello en lo que nos gastamos nuestro dinero.
Y, volviendo a la pregunta inicial, se vuelve mucho más fácil de entender si la formulamos desde esta perspectiva, ¿Cómo de cuestionable son las cosas en las gastamos nuestro dinero?
Vivimos rodeados de marcas y productos, y al final elegimos aquellos con los que nos sentimos identificados en mayor o menor medida seamos conscientes o no.
A lo mejor si intentamos ser más fieles a nosotros mismos, tendríamos un consumo más responsable y dándole la vuelta a esta pregunta.
Podrían nuestros gustos llevarnos a un consumo más responsable y mejor aprovechamiento de los recursos.
Yo creo que sí, solo tendríamos que concienciarnos de que en lo que gastamos nuestro dinero, nos define tanto cómo nuestros propios gustos.
"No solo tendríamos un consumo responsable, sería ir un paso más allá y tener un consumo de identitario más intuitivo y no consumir en aquellas cosas que van en contra de nuestra propia identidad."
© Eva Posada
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